Un estudio internacional revela que tener una mascota alivia el estrés y mejora la concentración de las personas.
Según el estudio revelado por la Universidad de Konkuk, de Corea del Sur, jugar con un perro, acariciarlo, darle de comer o abrazarlo puede aumentar las ondas cerebrales asociadas con el alivio del estrés y la concentración.
El estudio revela que tener contacto con perros incluso se ha relacionado con una menor presión arterial en las personas.
Algunos países ya utilizan a las mascotas como apoyo emocional cuando se encuentran hospitalizados, ya que ayudan a mejorar la presión sanguínea y alivia el dolor.
Acariciar o jugar con una mascota aumenta la intensidad de oscilación de la llamada banda beta, un estímulo que suele asociarse a una mayor concentración sin estrés, según el estudio.
Los participantes del estudio de la Universidad de Konkuk declararon sentirse significativamente menos fatigados, deprimidos y estresados después de todas las actividades relacionadas con el perro.